Un nuevo paradigma

por Natalia Quezada

Es de suma urgencia que luego de todo lo vivido durante el último tiempo, y en base a las decisiones que se han llevado a cabo, que las autoridades se alineen y trabajen en pos de solucionar los problemas que tanto nos aquejan y que hemos leído o analizado hasta el cansancio. Hay prioridades, es cierto, pero en algún momento tendremos que pensar si nos replantearemos o no, la forma de educar a nuestros niños. En lo que estamos de acuerdo es, en igualdad de oportunidades, para todos. Pero, creo que es importante que a futuro pensemos en un cambio de paradigma educativo.Ayer, funcionarios del Instituto Nacional de Derechos Humanos iniciaron una campaña para educar a niños sobre sus derechos, todo esto mediante la entrega de un cómic llamado «Arriba de la Pelota».

Según Beatriz Contreras, Jefa Regional Metropolitana de la entidad, señaló que “este material educa sobre los Derechos de los niños y adolescentes; y también sienta las bases acerca de la participación de los niños, niñas y adolescentes en la vida pública de nuestro país», lo que me parece relevante, según los tiempos que corren.

¿No será importante también enseñarles acerca de los deberes, obligaciones y valores fundamentales como participantes de una sociedad? Para crear un mejor futuro como país es indispensable comenzar por nuestros niños, y así como lograr la igualdad de derechos es fundamental, es sustancial reforzar valores importantes en la escuela que considero perdidos, como el respeto por la autoridad (a los profesores que he escuchado, dicen que se sienten dentro de un campo de batalla en las salas de clases), respeto por nuestros compañeros, fortalecer el trabajo en equipo, aprender a ser empáticos y sobre todo se debería conversar acerca de impartir nociones de autocontrol. Me sorprendí al saber que en otros países desarrollados y en donde poseen un fuerte sistema educativo como Japón, los primeros cuatro años se centran en desarrollar la personalidad del niño y en el fuerte desarrollo de la cultura cívica. Además, en las escuelas, a pesar de tener personal de aseo, se les enseña a los alumnos que es deber de ellos mismos mantener y realizar la limpieza de sus salas de clases, lo que aparte de cuidar su establecimiento, los obliga a organizarse unos a otros y a respetar lo que tienen. Quizás estamos lejos de ser un país desarrollado, y establecer un sistema educativo como el japonés pero creo fundamental comenzar a involucrar este tipo de aspectos en la enseñanza escolar. Quizás, si hubiésemos partido de antes, probablemente no habríamos sufrido de esta manera los efectos del vandalismo, y tendríamos más jóvenes que luchan por sus ideales pero que también cuidan y quieren a su país y a las cosas que nos pertenecen a todos.