El universitario se manifestaba en Plaza Italia cuando recibió el impacto. Oftalmólogos tratantes del hospital Salvador indicaron que la radiografía mostró que dentro del caucho del proyectil habían trazas metálicas.
Internado en el hospital Salvador está Vicente Muñoz, un estudiante de Teatro de la Universidad de Chile que fue herido al atardecer del lunes por unos seis balines en Plaza Italia. Uno de ellos impactó en su ojo izquierdo. El joven de 18 años habría recibido tiros disparados por equipos antidisturbios de Carabineros que repelían una protesta.
“Fue herido a dos metros de distancia”, denunció a la salida del centro asistencial su hermana, Catalina Muñoz. “Perdió la visión con ese ojo”, agregó.
La oftalmóloga del hospital, Rosa Balcells, explicó que el balín tenía 8 milímetros de diámetro y le provocó un estallido del globo. Por ello se le realizó una operación de limpieza y preparación para que reciba una prótesis.
“Está tranquilo, tratando de digerir su nueva realidad”, dijo la especialista.
Balcells indicó que si bien el balín era de caucho negro, agregó: “Creemos que tiene algún componente metálico en su interior, pues da una imagen metálica en la radiografía (…) No sabemos si es para darle más peso… es un proyectil que entra bastante fácil en el tejido ocular”.
“Puede ser una aleación, no lo sabemos. Eso tiene que ser parte de la investigación que estamos realizando”, añadió su colega, el oftalmólogo Álvaro Rodríguez.
El médico agregó que la mayoría de los pacientes recibidos llegan con lesiones provocadas desde menos de diez metros de distancia, pese a que la ficha técnica recomienda que se disparen a 30.
El hecho ocurrió en Vicuña Mackenna con Merced y se produjo el día en que Carabineros comenzó a aplicar el nuevo protocolo de uso de este armamento.
“Estaba ejerciendo su legítimo derecho de manifestación (…) No es fácil, hoy nos tocó a nosotros, durante las últimas tres a cuatro semanas le ha tocado a un montón de familias vivir este mismo dolor (…) Nuestra sociedad está siendo más vulnerada que nunca antes”, añadió Catalina Muñoz. “Cuando supere esto, mi hermano probablemente estará dispuesto en las movilizaciones nuevamente y nosotros como familia lo vamos a apoyar”, agregó.
Actuar policial
Según el Colegio Médico, más de 200 personas han sufrido la pérdida de globos oculares desde el 18 de octubre. El uso de estos equipos fue tratado incluso el lunes en Quito en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), donde se analiza la situación chilena.
Muñoz fue visitado por el rector de la U. de Chile, Ennio Vivaldi. “Tenemos un caso más de pérdida de visión de un ojo (…) El número es tal que muchos nos preguntamos hasta qué punto no es intencional atacar de ese modo a los manifestantes”, lamentó.
La universidad anunció que la rectoría y la Federación de Estudiantes presentarán un recurso. Asimismo, autoridades del Consejo de Rectores acordaron en la víspera que interpondrán otro libelo para que Carabineros cese el uso de balines para repeler manifestaciones, demanda a la que se plegaron senadores de oposición.
“Son hechos inaceptables”, dijo la presidenta de la FECH, Emilia Schneider. “Nos duele profundamente lo sucedido con Vicente (…) Quien diga que en Chile no se están violando sistemáticamente los derechos humanos niega la realidad y es cómplice de la impunidad (…) Emplazamos al Gobierno a prohibir el uso de balines”, añadió.
Este medio consultó a Carabineros si en este procedimiento se aplicaron las directrices del nuevo protocolo. Desde la institución respondieron que hasta la tarde de ayer aún no recibían una denuncia por el hecho para iniciar una investigación e indicaron que el protocolo ya rige. Éste considera acotar su uso, capacitar a los uniformados y obliga a que quien emplea estas armas debe portar una cámara.
En tanto, el jefe de la Zona Metropolitana Este, general Enrique Bassaletti, reconoció que los balines hieren, pero añadió que son efectivos para dispersar manifestantes con un perjuicio menor.
“No tenemos otra alternativa. Cuando estemos frente a un hecho grave (…) tendríamos que usar armas de fuego (…) No estaríamos hablando de emergencia de salud, estaríamos hablando de personas fallecidas”, dijo a radio Bío-Bío. Bassaletti aseguró que los balines son de goma y que la instrucción es que se disparen hacia abajo, para impactar en las extremidades inferiores.